¿Se le puede poner otra cerradura a una puerta blindada?
Desde que se tiene que se crearon las viviendas y negocios, los humanos siempre hemos buscado las maneras de proteger los bienes que dentro de dichos establecimientos resguardamos, así como para asegurar nuestro bienestar frente a las viles pretensiones de los amigos de lo ajeno. En la actualidad, todas las ciudades del mundo han experimentado una ola de delincuencia enfocada en el robo de viviendas y negocios, durante el último siglo. De ahí a que hoy en día todos nos preocupemos por instalar en nuestra casa o local comercial, no solo los mejores sistemas de seguridad, sino la mayor cantidad de protección que sea posible para adelantarnos a la astucia de los ladrones.
Lamentablemente, a medida que la seguridad avanza, los métodos de robo también, por lo que hoy en día ya todos sabemos que es imposible tener una casa o empresa 100% segura, pero sí es posible ponerle muchas dificultades a los ladrones para que no ingresen a nuestras propiedades. Es por eso que mucha gente en la actualidad no sólo ha empezado a instalar puertas blindadas en sus viviendas, negocios y locales comerciales, sino que también han empezado a mejorar su sistema de seguridad mediante modificaciones, o más bien, aditamento que le dan un plus a la protección que ofrece la puerta.
Si tú también estás interesado en mejorar la seguridad de tu negocio o vivienda, entonces sigue leyendo este artículo donde veremos cómo incrementar la seguridad que una puerta blindada ofrece y si es o no es posible añadirle otra cerradura. No olvides que el tiempo avanza y los métodos de robo también, así que no te quedes dormido pensando que la seguridad que una puerta blindada te ofrece es suficiente; aprende a mejorar la seguridad de tu puerta leyendo las siguientes líneas de este post.
¿Es posible instalar una cerradura en una puerta blindada?
Por supuesto que sí. En la actualidad todas las puertas son modificables, aunque algunas requieran más trabajo que otras. Por ejemplo, las puertas huecas se consideran las más fáciles de modificar porque están fabricadas con materiales manipulables que no requieren herramientas especiales o industriales para añadirles una cerradura, una mirilla o un cerrojo.
En cambio, las puertas blindadas tienen una o dos placas de metal resistentes en su interior, que hacen que añadir una cerradura sea toda una travesía, que implica llamar a un cerrajero profesional y, muy probablemente, dañar el acabado perfecto de la puerta. Es por esto último que no se recomienda en la mayoría de los casos, añadir una cerradura extra a las puertas blindadas. En la situación que estés desesperado por mejorar la seguridad de tu puerta blindada, lo más conveniente sería evaluar otras alternativas no destructivas de la calidad estética y funcional de tu puerta blindada.
Además, se ha demostrado que añadir otra cerradura a una puerta blindada no brinda mayor seguridad a tu casa que, por ejemplo, mejorar la seguridad de las ventanas o instalar cámaras de seguridad. Así que deja la paranoia y piensa más mesuradamente acerca de cómo mejorar la seguridad de tu casa, haciendo énfasis en los puntos débiles del sistema de seguridad.
¿Debería instalar un cerrojo de seguridad a mi puerta?
El plus de seguridad que añadirá un cerrojo acorazado o un cerrojo de seguridad a tu puerta blindada es puramente psicológico, y no funcional. Probablemente, instalando un cerrojo a tu puerta blindada te sentirás más seguro, pero realmente tienes la misma seguridad que antes. Por consiguiente, desde nuestra experiencia no recomendamos la instalación de cerrojos de seguridad a puertas blindadas, debido al malgasto de dinero que supone.
Muchos se preguntarán: ¿Cómo un elemento de seguridad extra no puede mejorar la seguridad de mi puerta? Es cierto, un cerrojo de seguridad podrá impedir que los ladrones roben en tu casa en más de una ocasión, pero lo cierto es que las probabilidades de que un ladrón burle tu puerta aprovechando una imperfección de la misma causada por la instalación del cerrojo, son mayores a las probabilidades de que el cerrojo te salve de un robo. En conclusión, el problema no es el cerrojo de seguridad en sí, sino su inevitable instalación destructiva que tiende a deteriorar la puerta blindada y a hacerla más vulnerable frente a los delincuentes.
La instalación de un cerrojo en una puerta blindada debe ser con un anclaje de dos tornillos, en el mejor de los casos, ya que si se realiza con cuatro tornillos se afecta notablemente el cuerpo de la puerta que puede ser roto simplemente acertando un fuerte golpe sobre el cerrojo. No obstante, dos tornillos no son un anclaje muy fuerte y recomendable que digamos, ya que los ladrones pueden desprenderlo fácilmente simplemente aplicando fuerza bruta. Sea cual sea el caso, los cerrojos pocas veces funcionan bien en una puerta blindada y por eso no se aconsejan instalarlos en ellas.
¿Qué hago entonces?
Una puerta de seguridad es uno de los mejores elementos de seguridad que existen hoy en día para viviendas o negocios, así que no infravalores estas puertas y confía en su sistema de seguridad altamente resisten. Recuerda además que los ladrones que se atrevan a intentar burlar una puerta tan fuerte como la blindada, no son ladrones novatos, son ladrones expertos que no les será problema deshacer de un cerrojo o cerradura de más.
Dicho eso, te sugerimos que mejor inviertas en otros aspectos de tu vivienda o empresa para incrementar la seguridad. No olvides que los ladrones no siempre ingresan por las puertas. De hecho, si ven que tu casa o negocio tiene una puerta blindada, lo más probable es que intenten ingresar por alguna de las ventanas. Así que anticípate a sus movimientos e invierte en la seguridad de tus ventanas. Lo esencial para la seguridad de una ventana es instalarle rejas y un cerrojo; de esa manera será imposible para los ladrones entrar a tu casa por las ventanas.
En el caso de que las ventanas no sean el problema y que la puerta blindada sea tu mayor preocupación, entonces te sugerimos cambiarla por una puerta acorazada de mayor seguridad. Sin duda alguna quedarás complacido con los resultados.